Participa Carmona: "No más feminicidios".

Los últimos meses han sido terribles. Se han multiplicado por dos las muertes de mujeres relacionadas con la violencia de género. Desde hace 15 años, nos persigue la cifra de la vergüenza de 60 asesinatos de mujeres a manos de sus maridos o exmaridos, parejas o exparejas. Estas cifras nos producen escalofríos y nos alientan a gritar bien fuerte: ¡NO MÁS FEMINICIDIOS!

Los casos de la violencia machista superan el límite legal y moral de la sociedad. Es aberrante actuar contra la mujer de forma intencionada, voluntaria y consciente.

Al analizar las causas de estos actos, aparecen el desprecio, la ira, los celos, el deseo de venganza, la frustración o el dominio. Pero también debemos tener muy presente el menosprecio social y la indiferencia ante este tipo de violencia. Nosotros somos responsables de esta situación.

Debemos luchar contra la violencia de género de la misma forma y la misma fuerza que lo hacemos contra las desigualdades y el patriarcado, que son los principales mantenedores y justificadores de estos actos deleznables.

Desde 1.995 son ya casi 1.400 mujeres asesinadas y esto es sólo una pequeña parte, aunque quizás la más repulsiva, de la violencia machista. Los ataques a los derechos reproductivos, los mitos misóginos, la cosificación del cuerpo femenino, el maltrato psicológico y físico, la dominación o el olvido de los derechos de las mujeres son otras formas de violencia, en ocasiones socialmente aceptadas.

Por ello, debemos reconocer la magnitud del problema: el maltrato y los asesinatos son TERRORISMO MACHISTA. Debemos rechazar la conducta del maltratador de la misma forma que al pederasta o al que comete un atentado.

Las desigualdades son las que llevan a las mujeres a la tumba. Es necesario concienciarnos y exigir que se aborde este problema como una cuestión de estado. Reclamando la protección y el tratamiento psicológico para las personas afectadas. Exigiendo la equidad hombre/mujer en cualquier ámbito. Reivindicando el fin del sensacionalismo en los medios de comunicación durante el tratamiento de esta problemática. Manifestándonos a favor de la eliminación de las custodias compartidas impuestas y el régimen de visitas a los maltratadores condenados, como de la retirada de la patria potestad a los mismos. Y pidiendo una mayor dotación de recursos para la realización de acciones encaminadas al fin de esta violencia.